Goma

Diversos termoplásticos tienen propiedades similares a la goma. Encontrará más información al respecto en el apartado ⇒ TPE (elastómeros termoplásticos).  La antigua separación estricta entre materiales plásticos y elastómeros se ha ido diluyendo con el paso del tiempo. Aun así, el término "goma" sigue refiriéndose al grupo de cauchos reticulados y, por lo tanto, no termoplásticos. Un caucho que sigue teniendo una gran importancia es el látex natural coagulado, que se obtiene de los troncos de los árboles de caucho. Aparte, existen diferentes tipos de cauchos sintéticos con propiedades similares a las del caucho natural (caucho estireno butadieno [SBR], caucho nitrilo butadieno [NBR], etc.). No obstante, no logran alcanzar las características esenciales del caucho natural, sobre todo, en cuanto a elasticidad permanente, elasticidad en frío y abrasión.  El caucho consta de polímeros de cadena larga (el caucho natural está compuesto por poliisopreno con un peso molecular en torno a 2 000 000). Los monómeros no tienen una disposición lineal, sino que forman un ángulo obtuso. La elasticidad de la goma se debe, en especial, a que estas macromoléculas se estiran al aplicarles fuerza, pero son capaces de regresar por completo a su posición inicial. Sin embargo, las características mecánicas mejoran notablemente gracias a la reticulación. Antiguamente, solo se efectuaba la reticulación con puentes de azufre entre las cadenas de polímeros; en la actualidad, esta práctica sigue gozando de relevancia, pero se ha completado con otros métodos de reticulación. Por lo general, la goma cuenta con una fricción cinética mayor que casi cualquier otra sustancia. Mediante recubrimiento con plasma y pintura antifricción, es posible mejorar con mucho las propiedades de deslizamiento. Asimismo, pueden lograrse mejores características de estanquidad por hidrofobización. Por último, el aspecto de los artículos de goma pura no resulta demasiado atractivo, puesto que su color natural es el marrón, pero su estabilización con hollín la suele volver negra. Mediante tratamiento con plasma, los productos de goma pueden obtener superficies de mayor valor decorativo.