Humectación
Se produce humectación cuando, al aplicar un líquido en un sólido, se extiende por él. La humectación no sucede obligatoriamente. Los líquidos cuentan con una tensión superficial, derivada de las fuerzas de cohesión de las moléculas superficiales. Esta tensión superficial es la responsable de que un volumen de líquido adopte una forma básicamente esférica. Solamente si las fuerzas de atracción entre las moléculas de la superficie del sólido y las moléculas del líquido son mayores que las fuerzas que mantienen la superficie del líquido en la forma actual, el líquido podrá extenderse por la superficie del sólido y, por lo tanto, humectarlo. Por lo general, se aplica la regla de que la energía superficial del sólido debe ser mayor que la tensión superficial del líquido para que se produzca la humectación. Si una sustancia debe adherirse a una superficie, resulta imprescindible la humectación de la superficie por parte de dicha sustancia. Por lo tanto, para realizar trabajos de pegado, impresión o lacado, el adhesivo, la pintura o la tinta deben humectar la superficie. La tecnología del plasma ofrece una amplio abanico de posibilidades para influir con eficacia en la energía superficial de los sólidos y, con ello, en la humectación. Encontrará más información al respecto en el apartado ⇒ Humectabilidad.